Vivimos una época en la que el cómic está de enhorabuena. Las editoriales se multiplican y los productos que salen a la venta son cada vez son más diversos. En España no podía ser menos y este tendencia queda patente en algunos puntos. El diario El Mundo ha estado vendiendo tres días por semana una selección de 46 volúmenes en la que hemos podido leer algunas pequeñas joyas del medio, junto a otras piedras no tan preciosas. El ABC ha estado vendiendo los fines de semana a un precio excepcional las aventuras de uno de los cómics que más han influido en las viñetas europeas: Tintín. El cine nos ha golpeado casi siempre en los riñones con las múltiples versiones de cómics como "Desde el Infierno", "Spiderman", "Mistery men", "Daredevil", "Camino a la perdición"... o la reciente "La liga de los hombres extraordinarios" del guionista británico Alan Moore.


Pues bien, en este universo de papel, principalmente desde los años ochenta y centrándonos en el universo del superhéroe, se han producido varias mutaciones que han llevado más allá a estos héroes imposibles. Con la aparición de los grandes autores, especialmente Alan Moore y Frank Miller, la narración gráfica en los Estados Unidos tiene un renacer. Estos autores hacen que los personajes cobren vida más allá de las normales irrealidades a las que estaban acostumbrados. En algunos casos Miller consigue llevar a los personajes al principio de sus vidas ("Batman: año uno"), al final de las mismas ( "El regreso del Señor de la noche") o darle un giro total a los mismos ("Daredevil: Born again").

En este artículo no voy a hablar de estas obras ni de estos maestros. En estas líneas quiero hablar de una narración gráfica que trata el futuro de un personaje, "Hulk: ¿Fin o principio". Si he de decir la verdad Hulk no es uno de mis personajes favoritos. Es más, lo cierto, es que no me gusta nada. Me parece de las peores creaciones de la editorial Marvel por su mente cambiante en función de cada guionista que le describe, por su trayectoria de muchos más bajos que altos... creo que este personaje a malvivido desde hace muchos años. Sin embargo, la reciente aparición de la obra "Banner" de Azzraello y Corben produce un efecto interesante en el personaje que sin duda recoge esta obra de Peter David. En este "¿Fin o principio?" el autor nos lleva a un futuro donde el ser humano ha desaparecido debido a una guerra nuclear y sólo quedan Hulk y su odiado Banner (para los neofitos, Banner es el ser humano en el que se convierte Hulk). Así que claro, se nos plantea una lucha entre ambos. Banner queriendo acabar con su vida porque está solo y porque no puede más y Hulk intenta sobrevivir.


Quizá le sobren páginas y quizá le falte alguna trama un poco más trabajada, pero este cómic tiene cierta profundidad psicológica, un espectacular dibujo de Dale Keown, y lo que es más importante: literatura y originalidad para un personaje que adolece de los mimos de su editorial.

Luis Miguel Artabe